Uno de los grandes dramas para la afición oviedista en pretemporada (quién les iba a decir que sólo era el preludio) fue la marcha de Borja Sánchez. El ‘Mago del Requexón’, que había sido la imagen de campaña la temporada anterior, abandonaba la disciplina oviedista por la puerta de atrás por su nula relación con Álvaro Cervera. La apuesta del Oviedo era evidente: dejaba marchar a su jugador estrella para apostar decididamente el proyecto en las manos del Almirante.
Sin embargo, y como es sabido por todos los aficionados al fútbol, la vida balompédica da muchas vueltas, y la realidad es que estando en septiembre, Cervera ya está fuera del conjunto carbayón. O lo que es lo mismo, la principal problemática que llevo a Borja a salir de su equipo del alma, ya no existe.
La situación contractual de Borja Sánchez facilitaría la operación
Así, si atamos cabos y tenemos en cuenta que Borja se encuentra jugando en un equipo del Grupo Pachuca, no sería de extrañar la vuelta del Mago al equipo de sus amores. Además, no cabe olvidar que el canterano se fue cedido al Club León hasta final de temporada, por lo que sería tan sencillo como disolver la cesión que une a Borja con León. Siendo conscientes, además, los directivos oviedistas, que una de las grandes zonas a mejorar en la ventana de invierno son las bandas, lo más lógico es pensar en la vuelta de Sánchez.
Y es que todas las partes querrán volver a pertenecer al mismo universo: el mejor canterano oviedista en muchos años volverá a vestir la elástica azul y la afición carbayona volverá a sentirse más cerca de sus jugadores. Deportivamente hablando, como comentamos, también se trata de una contratación más que necesaria.
Por último, quedaría por estudiar la opinión de Luis Carrión, actual entrenador del Oviedo, al respecto. Para conocerla, es tan sencillo como atender al estilo de juego que pretende imponer el director técnico, de buen trato de balón y posesión, que se adaptaría a la perfección al de Borja.