Con el mínimo objetivo de la permanencia ya bastante cercano (el Zaragoza cuenta con 40 puntos a falta de 9 jornadas para terminar la temporada regular), el conjunto maño comienza a preparar la planificación deportiva para el siguiente curso, el que será el primer año futbolístico de Juan Carlos Cordero como director deportivo zaragozano.
Con la profunda problemática para fichar en enero todavía muy presente, el máximo mandatario deportivo del Zaragoza tiene bastante claro con qué fichas debe contar el equipo aragonés la próxima temporada para poder aspirar a algo más que una temporada tranquila en la Segunda División. Y además de ciertas piezas que tienen que llegar desde fuera, hay otras válidas que pueden quedarse dentro del vestuario, aunque terminan contrato.
Lluís López cuenta para la 23/24, aunque el central termina contrato
Uno de ellos es Lluís López, central catalán que ha sido uno de los fijos en el centro de la zaga siempre que las opciones le han respetado. En concreto, el zaguero ha participado en 23 de los 33 partidos de liga, o lo que es lo mismo, ha participado en el 67% de los encuentros que el Real Zaragoza ha jugado en el campeonato, casi todos ellos como titular.
Además, el futbolista tiene por contrato una opción para renovar automáticamente, aunque no está claro que ésta vaya a cumplirse. Con la renovación de Lluís, el Zaragoza se aseguraría retener a uno de sus grandes valladares las últimas temporadas, sabedores que La Romareda es una plaza exigente, por motivos obvios, donde no todo el mundo tiene el carácter suficiente como para rendir a buen nivel.
Pese a los cambios de entrenador que se han producido en los últimos años en el club blanquillo, Lluís López ha terminado siendo titular con todos ellos, lo que deja a las claras que el nivel del manresano se encuentra por encima de la media de la zaga.